martes, 14 de abril de 2009

Capítulo 12: La Descendencia de la Serpiente y el Nuevo Orden Mundial (Importante)


Tal como se analizó al principio de publicar éste blog, solo el mundo antediluviano logró tener la breve hegemonía de un solo imperio mundial. Los ángeles reinaban directamente con sus hijos gigantes y educaron a la humanidad en las ciencias y en las artes para obtener el logro de una civilización superior próspera, pero apartada de Dios. No obstante, la Tierra se llenó de violencia y maldad. Tras el cataclismo del Diluvio, los ángeles rebeldes tuvieron varias dificultades en contactarse con las siguiente generaciones de humanos reclutados para su causa. Finalmente lo lograron a través de los sacerdotes y hechiceros antiguos. Pronto fundaron la base de las primeras sociedades secretas: Las escuelas de sabiduría mística. Ahora bien, ya podemos trazar la siguiente línea sin interrupción de transmisión de información a través de ésta descendencia de la serpiente:

1) Los ángeles y Nefilim antediluvianos.

2) Los sacerdotes babilonios y egipcios tras el diluvio. (Los llamados misterios egipcios).

3) Los sacerdotes de los misterios griegos. Escuelas de sabiduría.

4) Los colegios romanos. Mientras tanto tanto en América y China habían también sacerdotes.

5) La fusión de las ideas judías (fariseas), gnósticas, romanas y paganas.

6) Los Caballeros Templarios.

7) Los Masones, Rosacruces y el Priorato de Sión.

8) Los FrancMasones (Masones libres) de manera más directa.

9) Los Illuminatis.

De esta forma, y generación tras generación, la descendencia de la serpiente ha mantenido la línea de información y el arte para saber gobernar. Ha reclutado a sus soldados y los ha preparado en técnicas del control de la masa, y en muchas otras habilidades. De la rama Illuminati y masónica se han extendido muchas otras sociedades hijas como los Skull and Bones (Calavera y Huesos). Ésta es una sociedad secreta con sede en la Universidad de Yale, en New Haven, Connecticut, EE. UU. La sociedad fue fundada en 1832 por dos miembros de Phi Beta Kappa, William Huntington Russell y Alphonso Taft. Esto ocurrió 2 años después de la muerte del Fundador de los Illuminati, Adam Weishaupt. Figuras influyentes han pertenecido a ésta sociedad como los Bush, y la cúpula de la CIA (Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos). Otras sociedades hijas como el Club Bohemian y el Club Bilderberg reclutan a ciertos miembros públicos más conocidos. No obstante, las sociedades madres se mantienen en las sombras.

Es así, como hasta el día de hoy, los ángeles rebeldes han tenido su prole espiritual en la Tierra. Solo seres sobrehumanos han podido mantener esa línea de información y levantar pacientemente el sistema. Ahora creen que ha llegado el tiempo para resucitar el Mundo Antediluviano, La Nueva Atlantida.

Ahora bien, si el lector tiene dudas sobre lo expuesto en este blog, transcribo lo siguiente publicado en el libro ORIGIN OF THE NEW WORLD ORDER" (ORIGEN DEL NUEVO ORDEN MUNDIAL) por Jim Rector:

"La fuente principal de esta anécdota se encuentra en los escritos del filósofo griego Platón, fechados alrededor del año 400 AC. Se dice, sin embargo, que esta historia se deriva de un relato oral transmitido desde mucho antes por otro filósofo griego, Solón, comúnmente llamado el padre de la democracia griega. Solón recibió el relato alrededor del año 600 AC mientras estudiaba con los sacerdotes del templo de la diosa Isis en Sais, Egipto. La "leyenda" entonces pasó oralmente por varias generaciones hasta el tiempo de Platón, cuando él la registró en uno de sus diálogos.

Solón, aunque griego, fue aceptado por los sacerdotes de Isis quienes le revelaron muchos de sus secretos. De acuerdo al relato, Solón fue bajado por una larga serie de escalones antiguos que eventualmente conducían hacia una cámara subterránea a través de la cual fluye una porción del río Nilo. El filósofo griego y sus anfitriones abordaron un pequeño barco y navegaron hacia una isla profundamente subterránea. En esta isla había dos columnas hechas del raro metal “orichalcum”, el fabuloso e indestructible material de la Atlántida. Sobre estas enormes columnas había escritos extraños en un lenguaje incomprensible, desconocido para Solón.

Solón fue instruido que las columnas fueron erigidas allí años previos por una raza de gentes quienes desaparecieron misteriosamente. Según esta tradición, la mencionada civilización estaba localizada en el antiguo continente de la Atlántida. Las inscripciones enigmáticas en las columnas se dice que eran las “leyes de la Atlántida”, dejadas allí para guiar a la humanidad hasta el tiempo determinado cuando la era de la Atlántida renacería y florecería una vez más.

La Atlántida estaba aparentemente gobernada en ese tiempo por una asociación de “estados cooperativa” de diez reyes conocidos como la “Liga Atlantidiana”. De acuerdo con la tradición, estos reyes tomaron una decisión trascendental de invadir los otros continentes de la tierra y someterlos bajo dominio. Esto, sin embargo, fue una trasgresión a la ley de sus dioses quienes se indignaron grandemente. El dios principal, Zeus, se vengó destruyendo totalmente la Atlántida, causando que el continente se hundiera bajo las olas del océano. Nota*

Nota*: Esto es una narración griega (adaptada con los siglos), pero sabemos que fué Jehová quién envio éste Diluvio.

Garantizado, esta narración puede fácilmente ser divulgada como mitología, pero temo que de ser así se perdería el entendimiento que se puede obtener con respecto al origen antiguo del llamado Nuevo Orden Mundial. De primordial importancia es el hecho de que la "leyenda" de la Atlántida se admite como la base sobre la cual prácticamente todas las sociedades secretas fueron fundadas. Esto sólo catapulta la historia de la Atlántida a una posición de prominencia. El eminente líder masónico, Manley P. Hall, una vez señaló:

La liga de los diez reyes es la asociación de ‘estados cooperativa’ de la humanidad, la forma natural y propia de gobierno humano. La historia de la Atlántida es, por lo tanto, el arquetipo o el patrón de gobierno que existió en tiempos antiguos, pero que fue destruido” (El destino secreto de América, 1944, p. 59).

Sí, la tradición masónica en efecto puede ser trazada muchísimos años atrás a la civilización aparentemente mitológica de la Atlántida. De hecho, la sociedad influyente de los inicios masónicos claramente entiende que el patrón de gobierno que prevaleció en el continente de la Atlántida, es su propio modelo para un gobierno mundial y el lanzamiento de una nueva era.

La desaparición de la Atlántida fue uno de los eventos más cruciales de toda la historia humana. El conocimiento sobre este gran reino nunca se perdió. Ha sido preservado tanto oralmente como en palabra escrita. Su realidad difícilmente puede ser negada. El anhelo de los que están en el movimiento globalista siempre ha sido restaurar el sistema de vida de esta fabulosa civilización perdida.

El padre de la Masonería moderna, Sir Francis Bacon, escribió un libro a principios del 1600 titulado “La nueva Atlántida”. En esta obra expuso la idea para una sociedad utópica al otro lado del océano de Europa donde la humanidad podía construir una nueva civilización basada en los principios de gobierno que él creía eran aquellos del legendario continente perdido de la Atlántida.

María Bauer Hall escribe en su libro, “Colección de emblemas antiguos y modernos”, lo siguiente:

“Verdaderamente el sexto gran Imperio del mundo Occidental tuvo sus comienzos con la llegada de Sir Francis Bacon... el verdadero padre de la democracia, el actual y verdadero fundador de América... y [quien] fue guardián y protector de su historia durante los últimos trescientos años... Él es el fundador de la Masonería Libre... el guía de la Orden de los Rosacruces, de la cual sus miembros mantuvieron viva la antorcha del verdadero conocimiento universal y la Doctrina Secreta de las edades durante la noche oscura de la Edad Media. Bacon ha sido iniciado en el nuevo liberalismo representado en toda Europa por las sociedades secretas intelectuales dedicadas a las libertades civiles y religiosas... Más tarde, cuando el momento fue propicio, lanzó su plan de colonización inglesa para América... abrigando el sueño de una gran asociación en la Nueva Atlántida” (pp. 9-10).

La leyenda Atlantidiana parece establecer la base ideológica sobre la cual descansan todas las sociedades secretas. Ya sea la “Asociación Cooperativa de diez reyes”, “El Imperio Filosófico”, “La Nueva Liga Atlántica”, “El Nuevo Orden Mundial” o simplemente “La Nueva Atlántida”– el significado es siempre el mismo: establecer un lucífero (resplandeciente, iluminado, culto) Gobierno Mundial.

¿Qué es un lucífero gobierno mundial? En realidad es un gobierno y un mundo libre de religión, que excluye del todo al verdadero Dios, e instala el humanismo y finalmente la adoración a Satanás mismo, como los pilares preeminentes de la sociedad. El famoso líder de la libre masonería, Manley P. Hall, describió la búsqueda de este tipo de civilización:

“Por más de tres mil años, las sociedades secretas han laborado para crear el trasfondo de los conocimientos necesarios para el establecimiento de una lucífera democracia entre las naciones del mundo... El crecimiento de la iglesia cristiana trajo persecución... guiando al gremio (de las sociedades secretas) hacia una mayor secretividad; pero todos han continuado la búsqueda por la felicidad humana bajo una variedad de rituales y símbolos; y todavía existen hoy” (El Destino Secreto de América, p. 72)

Es asombroso y alarmante cómo este concepto se ha diseminado extraordinariamente entre los lideres políticos, financieros e industriales del mundo de hoy. En efecto, no existe mayor personificación de esta noción que aquella que se ejemplifica en el espíritu de la actual “Organización de las Naciones Unidas”. (Fin de la transcripción).

Sí, el Plan del Nuevo Orden Mundial mencionado tanto en estos últimos días de forma pública a raíz de la crisis financiera global, es en el fondo el plan de los ángeles, que quieren resucitar la gloria de aquel mundo antediluviano. Pero Jesús dijo: "así como era en los días de Noé...." Claramente este arreglo satánico chocará contra el Reino de Dios.